Organismo estatal le rebajó 200 millones de pesos al Decano y 100 millones a los viñamarinos.
Era uno de los beneficios que otorgaba la Ley 20.019 sobre Organizaciones Deportivas Profesionales: El artículo segundo transitorio entregaba a los clubes la posibilidad de alcanzar un acuerdo con la Tesorería General de la República para condonar al menos los intereses y multas de las millonarias deudas que mantienen las instituciones con el fisco.
Por ello es que en Everton la expectativa era grande. Hasta ayer, momento en que desde la Tesorería General de la República se dieron a conocer las rebajas.
En calle Independencia los rostros eran de alegría. Pedro Bombal, miembro de la comisión directiva del Fondo del Deporte Profesional caturro, confirmó que los porteños iban a descontar cerca de 200 millones de pesos a su deuda de $ 600 millones con el Estado, explicando que esa suma corresponde al 64% de los intereses y 90% de la multa acumulada.
Bombal también adelantó que las cuotas a cencelar a la Tesorería deberían ascender a cerca de 1.8 millones de pesos mensuales desde el próximo 30 de abril y por 20 años.
PANORAMA VIÑAMARINO
En Everton resultó mucho más favorable de lo que esperaban. José Araneda, presidente de la corporación que todavía mantiene un porcentaje en la S.A.D. oro y cielo, fue el encargado de realizar el trámite.
El dirigente confidenció que el monto inicial adeudado a la Tesorería General de la República ascendía a $ 246.316.449 y que fue rebajado a $ 146.592.580, es decir, hubo un "perdonazo" de casi cien millones de pesos ($ 99.723.869). El plazo para cancelar que solicitaron los viñamarinos fue el mismo que el de los caturros: 20 años.
Araneda también comentó que ahora resta por negociar las deudas previsionales, por una suma cercana a los 66 millones de pesos, cifra a la que se le tienen que agregar otros 33 millones por concepto de multas.
"Ese último ítem es el que queremos tratar de que baje, por lo que realizaremos las gestiones pertinentes, en todo caso, sabemos que no queda otra que pagar", sostuvo.
Una carga que deberá afrontar la sociedad anónima comandada por Antonio Martínez, la que asumió las deudas históricas y de arrastre que afectaban a la institución de Viana.
El plazo legal para tener resuelto todo este tema vence el 7 de enero próximo (dos meses después de la transformación), por lo que los regentes oro y cielo deberán moverse a toda velocidad.
Fuente:www.mercuriovalpo.cl